martes, 18 de mayo de 2010

UNA SEMANA DE OXÍGENO

No se trata de salir de Ausbitch, es sólo una especie de síndrome claustrofóbico que me enreda los tobillos cada domingo al dar las ocho, imagino que, en parte, es normal, pues a pesar de mi ilusión incipiente por venir, por estar y por seguir aquí, como bien dice mi (nuestro) psicólogo (incluso me lo ha llegado a decir una enfermera) necesito "escapar" , por unos días para tomar aire. Imagino que no tengo nada de especial en eso, que a todos nos vendría bien poder ir y venir, un poco a nuestro antojo; yo, de momento tengo la suerte de tener que ir a las revisiones a mi ciudad encantada y, además tener quién me lleve y me traiga, no puedo pedir más.
Pasad buen finde, no tratreis de ser quien no soys, ese es mi consejo para este y el resto de los días.

viernes, 14 de mayo de 2010

El néctar de las flores...

3 Camisetas, 3 chapas, alguna cerveza sin alcohol; la melancolía de ver a más gente de la que esperaba y menos de la que me hubiese gustado, MELANCOLÍA, esa es la palabra que define MI WOMAD 2010, no va a ser el último y, muy probablemente, tampoco vaya a ser el más pintoresco (que ya los ha habido). Agua, las hadas del agua estaban en todo Cáceres, las hadas del agua, de la lluvia, obligándonos a humanos, perros y perro-flautas a apretujarnos aún más que otros años para que esas que se encargan durante todo ese fin de semana (lo nunca visto, en serio) del buen rollo, del buen carma y de la melancolía.

viernes, 7 de mayo de 2010

MAYO / (6-8)/ 2010

 No me reconozco, no intento hacer reir, en general, las hadas no sé si mañana estarán esperándome en el lugar de destino o vendrán conmigo desde el principio.
No recuerdo los yembés, no me alcanza el olor a azahar de las torres.
No es posible que lo haya soñado todo, todos estos años... el coma no puede dar para tanto...
Según mi única fuente de información (YOUTUBE) la primera noche, como todas las primeras noches de festival, no cavía un alfiler en la plaza; no digo que la cosa no estubiera muy repartida... que en S. Jorge y en Sta. María estuviera la cosa más tranquila o quizá no.
Portaos bien, o no, divertíos, eso porsupuesto, o por las hadas, o por mi infarto, o por mi gene, a la que beso con afecto y mucho amor desde aquí: David, el primero; Marisina, por ser un regalo en sí misma; Pepe y Adolfo porque soys peculiares y también me quereis y no me extrañaría veros mañana aquí. A Sara, Carmen, Silvia, Maribel, por intentar cuidar de mí cuando aún estábamos a tiempo.A Jose Fermín, Rafa, Roberto y al resto; al señor abogado y sus colegas. A Alberto Amarilla, Sus hermanas, sobre todo a Fátima, que sufrió y rió conmigo en clase y sobre todo a su madre. A Cáceres, sin distinción de calles, barrios.
Porque estos días de WOMAD, seamos todos, al menos, amigos.